Cantabria tiene una situación geográfica privilegiada que nos permite disfrutar de su zona costera y sus montañas.

Nuestro recorrido en vehículos todo terreno nos ayuda a llegar a las cumbres y contemplar toda la inmensidad del Valle del río Nansa.

La protección de los espacios naturales pone al descubierto la importancia que estas medidas están teniendo para mantener y recuperar el ecosistema en su integridad ,incluída la flora y fauna.

Gradualmente abandonamos las cumbres y en el descenso atravesamos las zonas de bosques hasta llegar a los núcleos de población.

En un breve espacio de tiempo hemos visto las cumbre nevadas, la riqueza forestal y las praderas verdes.

La gastronomía típica de la comarca pone fin a nuestra visita.